EMILIANO COTELO (EC): Esta semana se dieron a conocer las conclusiones y recomendaciones que surgen de la última misión del Fondo Monetario Internacional en Uruguay.
En concreto, en el marco de la visita que realiza anualmente a nuestro país, el Fondo divulgó un comunicado en el que se analizan las principales fortalezas de Uruguay y los desafíos que el organismo entiende que debe encarar el gobierno hacia adelante.
Sobre este tema, vamos a conversar en los próximos minutos con el economista Luciano Magnífico, de Exante.
ROMINA ANDRIOLI (RA): ¿Te parece si empezamos ubicando a la audiencia sobre en qué marco se da este informe del FMI sobre Uruguay?
LUCIANO MAGNÍFICO (LM): Sí. Como recién adelantaba Emiliano, el Fondo suele realizar visitas anuales a sus países miembros para hacer un diagnóstico de su situación económica. Es importante aclarar que esto se hace en países que cuentan con préstamos vigentes con el FMI (como es el caso de Argentina) pero también se hace para el resto de los países miembros del organismo, aún sin contar con ningún tipo de financiamiento directo del Fondo. En ese segundo grupo entonces es que se encuentra Uruguay, dado que como sabemos el país no mantiene ningún endeudamiento con el Fondo.
RA: Queda claro. Si vamos ahora sí de lleno con el comunicado, ¿cuáles son las principales fortalezas que señala el FMI para Uruguay?
LM: En general, el informe reconoce las mismas fortalezas que los diferentes organismos y agencias suelen destacar de Uruguay. En concreto, el buen funcionamiento democrático, la fortaleza institucional y el alto grado de cohesión social son aspectos estructurales que se siguen repitiendo en este tipo de publicaciones. Por otro lado, dentro de las fortalezas estrictamente económicas se menciona la solidez del sector financiero, el alto nivel de reservas internacionales y el grado inversor que mantiene la deuda soberana. Asimismo, en esta oportunidad el comunicado también resalta el manejo de la crisis del año pasado, destacando la aplicación de una respuesta de política económica que cataloga de “efectiva”.
RA: Puede llamar la atención ese destaque cuando varias veces hemos comentado que la respuesta de política económica el año pasado fue bastante más acotada que en otros países. ¿En qué se apoya esa visión favorable sobre el accionar del gobierno uruguayo ante la llegada del Covid?
LM: Es cierto. Por un lado, el Fondo destaca como algo positivo que la respuesta de la política económica tuvo en cuenta las restricciones fiscales de partida con las que contaba Uruguay. Desde esa perspectiva, no se entiende como algo malo que la respuesta haya sido menos agresiva que en otros países.
Pero más allá de eso, también se refiere a aspectos más específicos. Entre las medidas más destacadas están la creación del seguro de paro parcial, así como el aumento de las transferencias focalizadas a grupos vulnerables. Además, el FMI consideró fundamental la ampliación de los plazos de repago de los préstamos bancarios y la creación de líneas de garantías beneficiosas para pequeñas y medianas empresas, a través del Sistema Nacional de Garantías (o SiGa).
Por otra parte, también se destacó que el Banco Central implementó una política monetaria expansiva, que permitió asegurar la liquidez para los agentes. El Fondo también ponderó la prudencia de la política salarial promovida por el Poder Ejecutivo, que considera fue clave para respaldar al mercado laboral el año pasado.
Finalmente y en el plano fiscal, el FMI destacó la creación del Fondo COVID-19 para registrar por separado en las cuentas fiscales las medidas aplicadas para contener los efectos de la pandemia. Asimismo, también considera que la implementación de la nueva institucionalidad fiscal fue importante para señalizar el compromiso del gobierno con la sostenibilidad de las finanzas públicas.
RA: Y si ahora pasamos a los desafíos identificados por el FMI, ¿cuáles son las principales aristas mencionadas?
LM: En el comunicado sobresale principalmente la problemática fiscal, que ya previo a la pandemia era uno de los principales desafíos de la economía uruguaya.
El comunicado también pone énfasis en los desafíos de la política monetaria para conjugar un anclaje de las expectativas inflacionarias dentro del rango meta, en un contexto de gradual recuperación de la economía.
Adicionalmente, también se señala la necesidad de revertir los impactos que generó la pandemia sobre el mercado de trabajo. En particular, se menciona el impacto que podría tener la pandemia sobre el capital humano, especialmente en los deciles de ingresos más bajos, lo cual se suma a los problemas previos que ya presentaba la educación en Uruguay.
Finalmente, también se apunta a la necesidad de promover otras reformas que hacen a la sostenibilidad del crecimiento.
RA: En lo que hace al frente fiscal, ¿el Fondo plantea proyecciones? ¿Hace recomendaciones?
LM: El comunicado menciona la necesidad de recomponer el espacio fiscal en el corto plazo, manteniendo un apoyo focalizado en los sectores más afectados por el COVID. En ese sentido, las proyecciones fiscales del FMI apuntan a que el déficit fiscal del sector público no financiero presente una mejora de casi un punto del PIB por año entre 2021 y 2023, en un marco en el que prevé un crecimiento del PIB en torno a 3% anual. Esto implica una mejora del resultado fiscal relativamente en línea con la que planteó el gobierno en la Rendición de Cuentas para el período 2021-2023 (aunque con diferente cadencia anual).
A mediano plazo, se considera necesario un esfuerzo fiscal adicional para situar a la deuda pública en una trayectoria bajista, de forma de aumentar el margen de maniobra ante futuros shocks. Al fin y al cabo, Uruguay dispone de una amplia liquidez y las condiciones de financiamiento son muy favorables, pero su deuda es alta. El Fondo prevé que la deuda bruta del sector público se va a situar en los próximos años en torno al 80% del PIB (más de 5% del PIB por encima del último registro oficial a junio de este año).
Por otra parte, también se marca la necesidad de introducir ciertos refinamientos en el marco fiscal. El FMI propone sobre este punto adoptar metas móviles de 5 años, introducir un objetivo de deuda explícito, y formalizar una cláusula de escape con algún mecanismo de corrección. De esta forma, el FMI considera que se garantizaría que la disciplina fiscal se mantendrá bajo diferentes administraciones.
Finalmente, el FMI también menciona que promover la reforma previsional es fundamental para garantizar la sostenibilidad fiscal en el largo plazo.
RA: Dejando de lado lo fiscal y pasando a otra de las cajas de herramientas con la que cuenta el gobierno, ¿cómo ve el FMI las perspectivas a nivel de la política monetaria?
LM: Sobre la política monetaria, el comunicado menciona que se deberá introducir un sesgo contractivo a medida que la economía se recupere, en línea con lo que viene siendo la postura del Banco Central (esta semana en concreto, decidió la segunda suba seguida de la tasa de interés de referencia). Entiende que debe hacerlo porque el principal objetivo pasa por afianzar la credibilidad y guiar la inflación de manera permanente hacia el rango meta. En relación a eso expresa una expectativa positiva, proyectando que la inflación seguiría bajando y cerraría los próximos dos años en niveles dentro del rango meta (5,8% y 5% para 2022 y 2023 respectivamente).
RA: Por otro lado, mencionabas antes también el énfasis del FMI sobre el mercado laboral, ¿qué se menciona en relación a esta temática que preocupa tanto en la actualidad?
LM: El comunicado considera fundamental la implementación de medidas que favorezcan la creación de empleo y aquellas que permitan una reasignación de la mano de obra entre sectores.
En ese marco y si bien se destaca el subsidio a la contratación de trabajadores de grupos vulnerables y las pautas salariales diferenciadas para los sectores más afectados por la pandemia, también se considera clave implementar una descentralización de las negociaciones salariales.
Por otra parte y como mencionaba antes, otra prioridad para el FMI pasa por abordar la pérdida de capital humano. Sostiene que el avance en la digitalización durante el último año y medio dejó en evidencia la necesidad de capacitar a los trabajadores acerca de las nuevas tecnologías. A su vez y en línea con lo que señalan los especialistas en esta temática, sostiene que es fundamental promover una reforma educativa que busque una solución al problema de la alta deserción escolar y asegure una convergencia de la educación a las necesidades de la economía del siglo XXI.
RA: Para cerrar. Decías que el FMI también había mencionado otras reformas que se consideran necesarias mantener o implementar, ¿cuáles serían dichas reformas?
LM: Dentro de estas otras reformas, el comunicado menciona los cambios establecidos en la fijación de los precios de combustibles, el impulso al desarrollo del mercado de capitales y la exploración de nuevos acuerdos comerciales.
Por otra parte, el FMI también considera que existe un espacio para profundizar las reformas en las empresas públicas, principalmente en el control y cito… “de actividades ineficientes e inversiones improductivas que suelen llevar a subsidios cruzados no presupuestados”. Además, considera esencial separar los objetivos comerciales de estas empresas públicas de sus objetivos sociales, lo cual implica también mejorar la independencia y la gobernanza de estas empresas.
Finalmente, el Fondo también incluyó en este reporte una mención sobre el compromiso de Uruguay con el medio ambiente y el desarrollo de medidas de política económica enfocadas en esta temática, que es algo que el gobierno está buscando impulsar en su agenda de trabajo.