Luego del final de los Juegos Olímpicos que se desarrollaron en Río de Janeiro, la atención en Brasil vuelve a estar puesta en la crisis política y en el juicio del Congreso contra la presidenta Dilma Rousseff que comenzará el miércoles de la semana que viene.
La semana pasada, la mandataria, que se encuentra suspendida en el ejercicio de sus funciones desde mayo, divulgó una “Carta a los brasileños” en la que niega las acusaciones que pesan en su contra pero reconoce algunos errores de gestión.
En la misiva, Rousseff anunció que en caso de que resulte absuelta en el juicio político, impulsará un plebiscito para adelantar las elecciones previstas para octubre de 2018. Además, comunicó que se hará presente en la sesión de la cámara de senadores del 31 de agosto para defenderse de los hechos que se le imputan.
Mientras tanto, el vicepresidente interino Michel Temer, del PMDB, da por descontada la derrota de Rousseff y se prepara continuar en el poder. Según distintos medios ya tiene pronto su discurso inaugural y se muestra confiado en que la recuperación económica pueda darle cierta legitimidad a su gobierno.
Este fue uno de los temas tratados en La Mesa de Análisis Internacional con Rafael Mandressi, Camilo López, Carlos Loaiza y Mauricio Rabuffetti.
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