Foto: Experiencia de un “pase responsable”, en el Auditorio Adela Reta del SODRE. Foto: Pablo Vignali / adhocFOTOS
El sábado pasado, el Auditorio del Sodre volvió a tener un espectáculo de su Ballet Nacional, luego de varios meses con las puertas cerradas.
La función formó parte de la prueba de “pase responsable” que realizó allí el gobierno, un sistema que se está preparando con la idea de facilitar la reapertura de eventos culturales, deportivos y sociales con garantías sanitarias pero un aforo mayor al permitido antes de que entraran en vigor las últimas restricciones.
La experiencia se desarrolló en la sala Hugo Balzo, la más chica del complejo, con un público limitado y compuesto por periodistas e integrantes del gobierno, sin representantes de la oposición salvo por las directoras de Salud y de Cultura de la Intendencia de Montevideo. Todos ellos debieron pasar previamente por un test rápido de covid-19.
Debido a una medida sindical, el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira, fue quien tomó la temperatura a quienes ingresaban al edificio, junto con el presidente del Sodre, Martín Inthamoussu. Los trabajadores se habían opuesto a estar en contacto con los asistentes antes de que recibieran el resultado negativo de sus tests.
Además, en la puerta sobre la calle Andes hubo dos manifestaciones en simultáneo: una que acusaba de discriminación a los organizadores del evento y hacía proclamas anti vacunas, liderada por Gustavo Salle. La otra, integrada por colectivos de artistas.
La Tertulia de los Lunes con Martín Bueno, Juan Pedro Mir, Agustín Iturralde y Ana Laura Pérez.
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