Foto: Mary Altaffer / POOL / AFP
El presidente peruano, Pedro Castillo, viajó por primera vez a Estados Unidos desde que asumió como mandatario.
En Washington, ante la OEA, Castillo negó que su gobierno sea comunista y llamó a invertir “sin temores” en Perú:
Nosotros no somos comunistas. Nosotros no hemos venido a expropiar a nadie. Nosotros no hemos venido a ahuyentar las inversiones. Por el contrario: a llamarlas, a los grandes inversionistas, a los empresarios, para que vayan al Perú. Para que lleguen al Perú.
Ataviado con su sombrero característico, típico de la zona rural del norte del país andino, Castillo también habló ante representantes de la Cámara de Comercio de Estados Unidos y la Cámara de Comercio Americana del Perú.
Esto sucede luego de un par de meses que no han sido tranquilos para este maestro rural y sindicalista. El último problema provino de la muerte de Abimael Guzmán, líder histórico de la guerrilla Sendero Luminoso, por las acusaciones desde la derecha de que el presidente tendría simpatía por este movimiento.
A principios de agosto tuvimos un contacto con Perú sobre los primeros días de Castillo como presidente. Esta mañana les propusimos una puesta a punto.
Para eso, conversamos con Rodrigo Barrenechea, politólogo peruano.