El presidente de la Asociación Nacional de Micro y Pequeñas Empresas habla sobre el efecto que tuvo la epidemia en ese sector
Las micro y pequeñas empresas se han visto muy golpeadas por el freno de la actividad que se impuso con la emergencia sanitaria desde el 13 de marzo.
En una gran cantidad de rubros estas empresas permanecen cerradas, pero en otros la necesidad de tener alguna venta las llevó a abrir sus puertas y a adaptar sus esquemas de trabajo.
Pero tanto las que se encuentran detenidas como las que están funcionando atraviesan serias dificultades operativas debido a la parálisis económica que atraviesan el país y el mundo.
¿Cuál es la situación? ¿Cómo empieza este sector a planificar el día después de la pandemia? En Perspectiva lo conversó con Pablo Villar, presidente de la Asociación Nacional de Micro y Pequeñas Empresas.
Destaques de la entrevista:
- "Reconocemos que el gobierno ha tomado medidas alineadas con las necesidades de los sectores más vulnerables desde el punto de vista de la actividad económica".
- "El sector de la microempresa tiene una problemática importante: desde el cerrajero que cerró su local y sigue pagando alquiler, desde el BPS y vencimiento de DGI, es una parafernalia de costos que cuando estamos en actividad se puede llevar pero sin actividad es difícil".
- "Habría que implementar otro paquete de medidas. Tiene que haber corrimiento de la fechas de pago de BPS y DGI".
Foto: Almacén y bar La Giraldita. Crédito: Javier Calvelo / adhocFOTOS