Foto: Santiago Mazzarovich / adhocFOTOS
La primera muerte por covid-19 en Uruguay la anunció en conferencia de prensa el secretario de Presidencia de la República, visiblemente afectado. Fue un shock, una muerte con nombre y apellido.
Poco más de un año después, el país pasó las 4.000 muertes y la actitud de la gente es totalmente distinta. ¿Cuántos de ustedes que nos están escuchando registraron este hito con la misma gravedad con la que anotamos aquel primer fallecimiento?
Hace unos días, aquí En Perspectiva, el intensivista Arturo Briva, que integra el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH), señaló que se estaba dando una “desensibilización” ante la cantidad de muertes.
Este es el tema que les trajimos esta mañana en una nueva Mesa de Filósofos, una propuesta que de hecho vino desde la audiencia.
¿Por qué estamos encarando de esta forma el aspecto mortal de la pandemia? ¿Es mala esta suerte de insensibilidad? ¿Es una forma de escaparle a una muerte que se pone delante de nuestros ojos de una manera en la que no estamos acostumbrados?
Lo charlamos con Ana García, profesora de filosofía, psicóloga, y paliativista; Francisco O’Reilly, decano de Humanidades de la Universidad de Montevideo, doctor en Filosofía, profesor de Ética y de Historia de la Filosofía Antigua y Medieval; y nuestro coordinador habitual, Miguel Pastorino, licenciado en Filosofía, magíster en Dirección de Comunicación, profesor en la Universidad Católica.
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Lecturas recomendadas y mencionadas en La Mesa:
- Estoicismo, muerte y pandemia, de Francisco O’Reilly.
- El hombre en busca de sentido, de Victor Frankl.
- Covid-19: Un manual de acompañamiento para niños en proceso de duelo
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