Foto: Handout / Colombian Presidency / AFP
40 días estuvieron perdidos en la selva colombiana los hermanos Lesly, de 13 años, Soleiny, de nueve, Tien Noriel, de cinco, y Cristin de solo uno.
Totalmente solos, en un área recóndita en la que llueve 16 horas al día.
Viajaban en una avioneta junto con su madre, pero la aeronave cayó el 1º de mayo en la Amazonía y en el accidente murieron todos los adultos a bordo.
La noticia de la desaparición de los cuatro niños disparó una búsqueda masiva: un centenar de soldados y más de 70 exploradores indígenas buscaron durante semanas con cada vez menos esperanza.
Esto debido no sólo a la soledad y las inclemencias del clima, ni siquiera por la presencia de animales salvajes y serpientes venenosas, sino también porque en la zona operan grupos armados que reclutan a niños.
Que hubieran caído en esas redes era una preocupación importante de su padre.
Los pequeños se quedaron primero junto a los restos del fuselaje, y cuando se les acabaron los insumos se alejaron y se alimentaron a base de frutos silvestres. El liderazgo heroico de la hermana mayor, Lesly, fue clave. Construyó un refugio y mantuvo a los más chicos con ánimo.
Según explicó uno de los exploradores indígenas a la AFP, el hecho de que los hermanos pertenecieran al pueblo amazónico Huitoto les daba un conocimiento de la zona suficiente como para saber qué comer y qué no, y para esconderse cuando percibían amenazas.
Pero justamente ese miedo los llevó a ocultarse también de los rescatistas. Cuando finalmente los encontraron, estaban a pocos kilómetros de la avioneta caída, en un sitio por el que los buscadores ya habían pasado.
Estaban desnutridos, debilitados. Uno de ellos ya no podía caminar por la falta de fuerzas. Pero estaban vivos.
Fueron transportados al Hospital Militar Central de Bogotá, donde, según se ha informado, se recuperan satisfactoriamente.
Es un caso impresionante, tal vez comparable al Milagro en Los Andes. Y hoy les proponemos desplazarnos hasta allí, conocer mejor la zona, la selva, entender hasta qué punto fue difícil la búsqueda y por qué es tan increíble que hayan sobrevivido.
Para eso, conversamos En Perspectiva con Silvio Pereira, uruguayo residente en Colombia, con quien hemos conversado en otras oportunidades, y quien conoce la selva colombiana por el trabajo que tuvo durante años como educador social en la ONG Fondo Acción.
