Por Ricardo Pascale ///
A mediados de los 70, siendo ya Grado 5 en mi Facultad, fui a la Universidad de California, Los Angeles, a un Posdoctorado en Finanzas. En varias materias, un 20% o más de los créditos para aprobarla provenían de la creatividad. Había que resolver y dar soluciones, no solo diagnósticos. Hacer trabajos creativos: actuar, cantar, pintar o escribir según las preferencias. Al tiempo, le pregunté a un profesor la razón de la política. Su respuesta fue: "En el mundo que se aproxima, repetir manuales y formulas no será suficiente, deberán ser creativos”. De allí en más, mi forma de mirar los problemas y dar mis cursos cambió, y profundicé en la creatividad e innovación.
Apunto algunas lecciones menos intuitivas de la cultura innovadora, no tan transitadas, aprendidas de maestros, experiencias, colegas y errores.
Anoto.
Paternidad innovadora
Establecer una filosofía de “fijar raíces y tener alas”. Tener claros los objetivos de la organización o del Estado y luego dar discrecionalidad para que desarrolle su trabajo en esos parámetros. En la creación no nos podemos obsesionar con los plazos y los presupuestos que puedan obstaculizar la innovación. Los científicos saben sus límites.
¿La lección? Esa confianza da impulso a una cultura innovadora.
Organizar en red
Mas allá de jerarquías, la organización en red permite a las mentes innovadoras eludir trabas que obstaculizan la creatividad.
En un congreso en la Universidad de Virginia un chico preguntó, por razones personales, si podía hablar antes. La organización lo permitió. Su aporte fue muy novedoso y lo usamos hoy.
¿La lección? Si el joven no hubiera insistido en hablar, hubiéramos perdido ese excelente aporte original.
Escenarios de crisis
Es frecuente que las organizaciones generen una lluvia de nuevas ideas. Eso es muy bueno. También lo es ensayar escenarios de crisis. Si sobreviene una: ¿cómo reaccionamos? En mis años en el Banco Central del Uruguay, a la salida de la dictadura, los problemas económicos y sociales eran muchos. No podía desperdiciar una gota de conocimiento de los funcionarios del banco. Creamos Think tanks con economistas, financistas, abogados y lo necesario, que habían aprendido en otros bancos centrales importantes.
Varias miradas a la caja son clave.
Temas de esos Think Tanks eran, por ejemplo, la situación argentina (si se salía de cauce, ¿que haríamos?). Lo mismo con Brasil (si su shock sería permanente o transitorio), o si una institución bancaria entrara en problemas, ¿cómo proceder?
¿La lección? No solo adelantarse a los problemas, sino ensayar escenarios de crisis, puede mostrar aspectos no vistos y que son innovadores.
No morir de hambre ni de indigestión
Parece claro que muchas organizaciones no innovan y parecen morir de hambre por falta de ideas. Otras tienen muchas ideas y proyectos. Allí pueden morir de indigestión. Los científicos pueden atender dos proyectos, por ejemplo, y se retroalimentan. Si atienden mas a la vez los esfuerzos se diluyen y puede haber frustraciones.
¿La lección? Innovar e innovar, y los científicos concentrarse cada uno en pocos proyectos.
Intensificar relaciones externas
I+D interna es vital, pero también mantener relaciones con otros innovadores, startups o universidades, que pueden llevar a mejorar las ideas originales.
¿Lección? No solo I+D interna. La organización se enriquece del intercambio de ideas y de información externa.
No alcanza vacunar una manzana de la ciudad
La cultura de la innovación tiene gente de avanzada, pero es vital que su necesidad sea comprendida por amplias mayorías. No alcanza con vacunar una manzana cuando hay una epidemia; debe vacunarse toda la población.
Esto lleva a que se transforme en una política de Estado y a que se incorporen la creatividad y la innovación en la educación desde la primaria.
¿Lección? “Vacunar” tempranamente a toda la población.
No es oro todo lo que reluce
La cultura innovadora tiene sus lados oscuros. Uno de ellos es que se puede marginar a buena parte de la población que no accedió a nuevas tecnologías, y lleva, además de a frustraciones, a una caída de sus ingresos medios.
¿Lección? Innovación si, pero también políticas públicas de reentrenamiento y reinserción laboral.
Fueron estas solo algunas lecciones de la experiencia que quería compartir con ustedes, pues por la cultura de la creatividad y la innovación con equidad pasa el futuro bienestar.
***
Emitido en el espacio Tiene la palabra de En Perspectiva, lunes 19.08.2019
***
