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La política a escena
Los monólogos

Por

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Por Mariana Wainstein ///

“Hoje você é quem manda
Falou, tá falado
Não tem discussão”

Chico Buarque, Apesar de voçe

 

En la escena política de los países democráticos los políticos procuran comunicarse con la población de modo tal que al menos en la forma parezca surgir un diálogo, una comunicación interactiva, especialmente en períodos electorales. Ya en el poder, esa comunicación suele darse a través de conferencias de prensa y entrevistas. Los presidentes de los países democráticos sólo recurren a una cadena nacional en caso que se produzcan hechos de una extrema gravedad.

Tal vez quien dio la nota para establecer la excepción que justifica la regla fue el presidente de España Mariano Rajoy cuando llegó a aparecer en una conferencia de prensa a través de la pantalla de un plasma en un claro intento por huir de las preguntas de la prensa, lo cual provocó una reacción en los medios de todas las tendencias, que lo tildaron de anti democrático. En los países donde existen formas autoritarias de gobierno o democracias asentadas en una institucionalidad débil, el político en el poder prefiere el monólogo en vez del diálogo, y ello se acepta en forma natural.

En la Argentina kirchnerista la presidenta Cristina Fernández hizo uso y abuso de la cadena nacional. En algunos casos ésta resultaba muy entretenida, como cuando presentó el canal de YouTube de la Casa Rosada. Hubo casos en que llegó a utilizarla para hablar de temas tales como los llamados fondos buitres. No obstante, la más singular y estrafalaria resultó sin duda la cadena nacional a través de la cual la presidenta se dirigió a la Nación después de la muerte del fiscal Alberto Nisman. En ese caso no dudó, en lugar de condolerse por la muerte de un fiscal en circunstancias tan sospechosas, en escenificar una imagen de auto victimización a tal punto que desde la primera toma aparecía en silla de ruedas.

Otro ejemplo de monólogo político son los programas de radio y televisión de algunos presidentes en funciones. El Aló Presidente del venezolano Hugo Chávez -que llegó a ser de Nicolás Maduro-, la Sabatina de Rafael Correa en Ecuador y ni que hablar los largos discursos en vivo y en directo de varias horas dirigidos por Fidel Castro a la masa de conciudadanos achicharrándose bajo el sol tropical.

En Uruguay el presidente José Mujica introdujo el estilo caribeño del programa de radio propio. Muy a su estilo, la manera de comunicarse del presidente siempre resultó campechana, cerca de la audiencia, intentando reflexionar de forma coloquial sobre los diferentes avatares.

Es que todos los monólogos, por más bien intencionados que sean, no pueden dejar de sonar con cierto tono de autocomplacencia y de adoctrinamiento en la medida que no admiten réplica. También transmiten una sensación de soledad. Eso no quiere decir que el público no valore escuchar lo que el gobernante tiene para decirle, que en muchos casos puede ser muy importante.

Sin embargo, por más que algunos políticos y gobernantes se empeñen en sus soliloquios, no hay lo que hacer que los mejores monólogos nos los han legado los grandes dramaturgos, como es el caso del monólogo más famoso del teatro español, en el primer acto de La vida es sueño, de Pedro Calderón de la Barca, cuando Segismundo reflexiona sobre la vida y su suerte: “Sueña el Rey que es Rey, y vive / con este engaño mandando, disponiendo y gobernando; / y este aplauso, que recibe / prestado, en el viento escribe, / y en cenizas le convierte / la muerte, ¡desdicha fuerte! / ¿qué hay quien intente reinar, / viendo que ha de despertar / en el sueño de la muerte?”

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La política a escena es el blog de dramaturgia política de Mariana Wainstein. Actualiza los jueves.

Sobre este blog
Politólogos y sociólogos hacen uso (y a veces abuso) de la jerga teatral para reflexionar sobre la política: “actores políticos” y “escenario político” son solo dos ejemplos de una costumbre por demás extendida. Desde este espacio se profundizará en los elementos de ese mundo y se intentará descubrir cómo se construyen determinados escenarios, textos y personajes. Esto implica profundizar en temas que conciernen a la mediatización de la política, sus características y consecuencias. En suma, este blog estará dedicado a la “dramaturgia política”, es decir, al análisis político desde un enfoque teatral.