Foto: JUAN MABROMATA / AFP
En Argentina, la vicepresidenta de la república, Cristina Fernández, respondió ayer a las acusaciones de corrupción en su contra que se están tramitando en la justicia de su país.
El lunes la fiscalía pidió para ella 12 años de prisión, además de la inhabilitación para ocupar cargos públicos, por los delitos de asociación ilítica agravada y administración fraudulenta agravada.
El pronunciamiento ocurrió en la llamada “causa Vialidad”, en la que Fernández es indagada junto a otras 12 personas por haber supuestamente manipulado licitaciones de obra pública en la provincia de Santa Cruz, su cuna política, para favorecer al empresario Lázaro Báez.
Cristina, que fue dos veces presidenta, realizó ayer un discurso transmitido por redes sociales desde su despacho en el Senado, donde aseguró que “nada, absolutamente nada, de lo que dijeron fue probado”.
"Esto no es un juicio contra mí. Es un juicio al peronismo, a los gobiernos nacionales y populares”, afirmó Fernández:
"Por eso pide el fiscal doce años. Son los doce años del mejor gobierno que tuvo la Argentina en las últimas décadas. El de Néstor Kirchner y mis dos mandatos. Y lo digo con números. ¿Por qué nos poden doce años? Uno por la memoria, el otro la verdad y la justicia, por el FMI, por las AFJP, por YPF y Vaca Muerte, otro por el no endeudamiento, otro por el salario de los laburantes. Cuando me fui, los laburantes se llevaban el 51,8% del PBI, el resto se lo llevaban los empresarios. Ahora, ni hablar de cómo estamos. Por eso me van a estigmatizar y condenar. Y les quiero decir algo: Si naciera veinte veces, veinte veces haría lo mismo".
La Tertulia de los Miércoles con Patricia González, Carina Novarese, Óscar Sarlo y Desirée Pagliarini.
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