Seis personas fallecieron por covid-19 en el hogar Sarandí para personas con discapacidad en Colonia Valdense.
Cinco eran internos, y la última era una enfermera.
Hasta ahí el caso no es muy distinto de los brotes de coronavirus que se dieron en otros establecimientos de larga estadía, de los cuales hubo algunos con ribetes verdaderamente trágicos.
La diferencia es que, en esta ocasión, tanto los familiares de los internos como la Iglesia Evangélica Valdense, propietaria del centro, presentarán sendas denuncias ante la Institución Nacional de Derechos Humanos.
Los familiares ya lo han hecho y la Iglesia lo hará mañana.
Lo que denuncian es que tenían una fecha de vacunación para mediados de marzo, la fecha fue cancelada por las autoridades, pospuesta más de un mes, y que el día que se comenzó a inmunizar se detectó el primer caso de lo que se convertiría en un brote letal.
Conocimos un poco más de este caso y de por qué eligen denunciar con Carola Tron, moderadora de la Iglesia Evangélica Valdense del Río de la Plata, dueña del hogar Sarandí, y con Alma Malán, directora del establecimiento.
