Foto: Santiago Mazzarovich/adhocFotos
Una inversión “histórica” de 455 millones de dólares en el puerto de Montevideo y una rebaja importante de las tarifas que se cobra por la operativa con contenedores.
Con base en esos dos argumentos el gobierno defiende el acuerdo firmado en marzo entre el Estado y Katoen Natie que desactiva el litigio internacional por US$ 1.500 millones que la empresa belga había anunciado y, al mismo tiempo, extiende por 50 años la concesión de la terminal especializada de contenedores a Terminal Cuenca del Plata (TCP), donde Katoen Natien tiene el 80% del paquete accionario y la ANP el 20%.
Desde la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU), sin embargo, se plantearon preocupaciones. La semana pasada, cuando compareció en la comisión de Transporte del Senado, esa gremial señaló que el nuevo escenario que se configura en el puerto de la capital puede afectar los costos de las empresas uruguayas que venden al exterior y, por ende, la competitividad de nuestro país en los mercados internacionales.
Hoy, En Perspectiva, conversamos con Teresa Aishemberg, secretaria ejecutiva de la Unión de Exportadores del Uruguay.
