El gobierno interino de Bolivia, encabezado por Jeanine Áñez, denunció que Uruguay intentó desestabilizarlo con el planteo que hizo ante el Mercosur para que se le aplicara a ese país la cláusula democrática que habilita a llegar hasta la expulsión.
El ministro interino de la Presidencia, Yerko Núñez, defendió ante los medios en La Paz que el gobierno provisional es plenamente constitucional y está reconocido por otros países y por organismos como la Unión Europea. Núñez que el objetivo de las autoridades es la convocatoria de nuevas elecciones, tras haberse anulado las del pasado 20 de octubre, en las que había sido declarado vencedor Evo Morales entre denuncias de fraude formuladas por opositores.
El miércoles Uruguay pidió en el Consejo de Mercado Común del Mercosur que se inicien los mecanismos para aplicar la cláusula democrática del bloque a Bolivia. Según un comunicado de Cancillería, durante su intervención el ministro Rodolfo Nin Nova hizo referencia “a la actual situación que atraviesa el Estado Plurinacional de Bolivia, cuyo presidente constitucional Evo Morales fue obligado a renunciar a su cargo, provocando un quiebre institucional que representa una ruptura del orden democrático en los términos establecidos en el artículo 3 del Protocolo de Ushuaia sobre compromiso democrático en el MERCOSUR, Bolivia y Chile”.
El subsecretario de Relaciones Exteriores, Ariel Bergamino, dijo a Radio Uruguay que la solicitud se hizo por “coherencia”:
El protocolo ya ha sido puesto en práctica el pasado con Paraguay y Venezuela. ¿En qué difiere esta situación de la acaecida en Paraguay o en Venezuela? En nada. Es una ruptura institucional.
La Tertulia de los Lunes con Carolina Ache, Hernán Bonilla, Patricia González y Manuel Laguarda.
Foto: Jeanine Áñez, presidenta interina de Bolivia. Crédito: Aizar Raldes / AFP
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