Entrevista con la enfermera Cristina Muñoz.
EN PERSPECTIVA
Miércoles 10.05.2017, hora 8.25
EMILIANO COTELO (EC) —Tener que internarse en un hospital o en un sanatorio ya es, de por sí, una situación no deseable. Pero la experiencia puede complicarse si, además, el trato de los médicos o los enfermeros no es adecuado. Y eso suele ocurrir: cuántas veces los pacientes se quejan de que se los atiende con frialdad o autoritarismo, que no se pone atención a ruidos molestos que los tensionan o que hay falta de consideración a la hora de comunicarles malas noticias.
Atendiendo a esos reclamos, en los últimos años ha ido cobrando fuerza el concepto de humanización de la salud.
En España, en particular, existe el Centro de Humanización de la Salud del Centro Asistencial San Camilo de Madrid, que viene desarrollando desde hace años una serie de cursos, conferencias y seminarios. Y esta semana esa experiencia llega a Uruguay en actividades organizadas por la Fundación Astur, que dirige el contador Enrique Iglesias.
Vamos a conversar con Cristina Muñoz, enfermera, máster en Counselling, con un posgrado en Cuidados Paliativos. Ella es coordinadora del departamento de formación en el Centro de Humanización de la Salud, además de trabajar en el área de Calidad del Centro San Camilo de Madrid.
Se encuentra en Uruguay para dar dos cursos: el que ya dio en Montevideo entre lunes y martes sobre “Humanización del liderazgo”, y otro, el que dará hoy y mañana en Tacuarembó sobre “Humanización y relación de ayuda”.
Para empezar, vamos a ubicar a la institución. ¿Qué es el Centro de Humanización de la Salud del Centro Asistencial San Camilo de Madrid?
CRISTINA MUÑOZ (CM) —En Madrid atendemos adultos mayores y personas que se encuentran enfermas al final de sus vidas en un centro sociosanitario. Fruto de la experiencia del cuidado, generamos una reflexión sobre la importancia de la humanización en la atención a estas personas y a sus familias. Y de ahí se creó el Centro de Humanización como una plataforma de difusión no solo dentro de nuestra institución, sino también hacia otras organizaciones, asociaciones y colectivos tanto en España como en otros países, como es el caso de Uruguay, en materia de humanización y de trato digno a las personas, particularmente cuando se encuentran tan vulnerables como las que estamos observando.
EC —El concepto que ustedes trabajan no abarca solo la atención a la tercera edad, a los adultos mayores.
CM —Efectivamente, estamos hablando de la salud entendida como algo que nos atañe a todos, también cuando no tenemos ninguna enfermedad, sino que estamos en situación de vulnerabilidad con motivo de una discapacidad, o personas enfermas en un hospital o personas que se encuentran en situación de duelo porque han perdido a un ser querido, eso también las coloca en una situación de fragilidad.
EC —El Centro San Camilo de Madrid está administrado, precisamente, por la congregación de los “religiosos camilos”. En este caso, entonces, ¿la definición de humanización de la salud está atada a una concepción religiosa?
CM —No, el humanismo trasciende cualquier religión y cualquier creencia. Nosotros apostamos por una mirada del ser humano integral, en que no nos centremos solo en la intervención desde el punto de vista físico, que es lo convencional en el ámbito sanitario, de cuidado de la dependencia, sino que también apostamos por un cuidado emocional, psicológico, social y espiritual, pero no necesariamente desde una espiritualidad religiosa, sino la espiritualidad entendida por el mundo de los dolores de las personas.
