Desde el lunes de noche la información ha estado circulando en algunos medios y en las redes sociales. En una de las notas el titulo decía: "Emiliano Cotelo se desvincula de El Espectador".
Hoy yo quiero confirmar esa noticia.
El 31 de diciembre será mi último día, el último día de Emiliano Cotelo, en Radio El Espectador.
Junto con el fin de año, se cerrarán 22 años y 10 meses que habré pasado en esta casa, donde En Perspectiva y yo crecimos y maduramos y, al mismo tiempo, contribuimos a reposicionar a "la primera radio" del Uruguay, formando parte de una propuesta global, de periodismo y de comunicación, que abarcaba a Radio El Espectador, Urbana FM y Espectador.com, y de la que me he sentido muy orgulloso.
Ahora, ustedes deben preguntarse, sobre todo teniendo en cuenta esa historia tan larga y tan rica, ¿por qué me voy?
Porque desde comienzos de este año aquella propuesta global que abarcaba a las empresas del Grupo Espectador ha venido siendo modificada.
Ustedes tuvieron un indicio en el mes de abril.
El lunes 21 de abril cesó la retrasmisión de El Espectador en Urbana FM 92.5 y en su lugar comenzó a escucharse "Concierto/Urbana", una co-producción dirigida por Berch Rupenián. En esos días muchos oyentes nos consultaron insistentemente a los conductores de programas el por qué de aquella medida, que se concretó sin explicaciones.
Y el martes 22 yo respondí, de manera muy escueta, lo siguiente:
"Yo no soy la persona adecuada para contestar sobre este punto, ya que discrepo con la dos resoluciones: la cancelación de la retransmisión de El Espectador en FM en Montevideo y la elección de la programación que ahora se difunde por la FM 92.5."
Y luego agregué que se trataba de "decisiones adoptadas por el nuevo directorio del Grupo Espectador" que había asumido pocos días antes, "fruto del proceso de compra-venta del 90% de las acciones (…)".
¿Qué ocurrió desde entonces?
Lamentablemente, en estos seis meses mis discrepancias con los nuevos accionistas mayoritarios, en cuanto al rumbo del Grupo Espectador, se mantuvieron; y aparecieron otras diferencias. Hasta que llegó un momento en que entendí que lo mejor era que yo diera un paso al costado. Y por eso, el 31 de octubre notifiqué que 60 días más tarde, el 31 de diciembre, daría por finalizada mi vinculación profesional con Radio El Espectador y Espectador.com y que también en esa fecha dejaría sin efecto la autorización para utilizar la marca En Perspectiva, que me pertenece.
En esa ocasión se me pidió un período de 15 días de confidencialidad. Ese plazo venció el viernes pasado, y por eso este lunes comencé a informar internamente de mi decisión, en primer lugar al equipo de producción de En Perspectiva y a los tertulianos.
Era un proceso que iba a llevarme toda esta semana. Pero el mismo lunes de tarde el rumor ya se había filtrado a algunos portales de internet que, de noche, publicaron los trascendidos. Y al día siguiente, ayer, muchos de ustedes, nuestros oyentes, nos escribían y nos llamaban pidiendo la confirmación o el desmentido.
Ante ese panorama, resolví adelantar mis planes y opté por realizar hoy estas puntualizaciones. Me parece elemental, por respeto a la audiencia y a los anunciantes, o sea los dos pilares que han hecho posible este programa y que merecen enterarse de esta novedad de manera directa, y no por medio de dimes y diretes.
De todos modos quiero agregar algo importante. Hago esta aclaración hoy pero ahora, ya mismo, mi equipo y yo volvemos al trabajo.
No es mi intención hacer un "circo mediático" con este tema.
Desde este momento y hasta el 31 de diciembre me concentraré en seguir dirigiendo y conduciendo En Perspectiva como lo he hecho en cada jornada; con la dedicación, la energía y la pasión que siempre he puesto en este espacio, que concibo como un servicio público.
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Eso sí, antes de retomar nuestro menú periodístico de hoy quiero agradecer muy sinceramente a todas las llamadas y los mensajes, de apoyo y de aliento, que he recibido en estos días, muchos de los cuales no he podido contestar de manera directa.
Un abrazo grande a todos.
